lunes, diciembre 30

Así serán los alegatos del juicio oral por la muerte de Lucas Lin en la colonia del Colegio Lincoln

Este jueves comenzará el gran acto procesal del juicio oral: los alegatos. Llegan las definiciones de un debate que genera expectativa en el fuero Penal.

Llegó el momento. Luego de seis audiencias, el juicio oral por la muerte de Lucas Lin, el nene que se ahogó en la pileta de la colonia del Colegio Lincoln de La Plata, entra en el gran acto procesal de alegatos. ¿Qué pedirán los bloques acusatorios y de la defensa?

Lucas tenía 5 años cuando en la tarde del martes 5 de febrero de 2019 se ahogó en la pileta de la colonia de vacaciones del colegio. El predio recreativo se encuentra en 518 entre 135 y 137 y fue habilitado por la Municipalidad. Se sospecha que no contaba con todas las medidas de seguridad necesarias ni el personal adecuado.

Por este caso son juzgados el propietario del colegio, Rubén Monreal, la accionista Roxana Costa, el guardavidas Martín Argüelles, el director de la colonia, Osvaldo Ramos, el coordinador de la misma, Marcos Echaniz y la ex empleada de la colonia vacaciones Carolina Muro, todos acusados de “homicidio culposo”.

Muro y Argüelles, además, están señalados por “abandono de persona seguido de muerte”.

También son juzgados los inspectores municipales Miriam Salinas Diego de Luca, procesados por “incumplimiento de los deberes de funcionario público y falsedad ideológica de instrumento público”.

Se sospecha que firmaron las actas de habilitación del predio de manera irregular y luego “armaron” el expediente para, se cree, intentar deslindarse de sus responsabilidades.

Apuntes del juicio oral

Durante las seis jornadas, declararon solo dos acusados (Argüelles y Ramos). El resto se mantuvo en silencio, ejerciendo su derecho de no declarar. También lo hicieron exempleados de la colonia. De sus relatos surge que el predio funcionaba fuera del marco legal correspondiente, con poco personal y que la mayoría no tenía la formación y experiencia necesaria. Un resultado fatal era posible.

Los testigos señalaron a Monreal y Costa como las personas que daban las directivas y tenían poder de decisión final. También apuntaron a Ruth Pasadore, pareja de Monreal, quien no es juzgada en este proceso, pero sobre quien pesa un pedido de apertura de investigación. Pasadore declaró como testigo, se auto percibió como una simple secretaria de su pareja, aunque fue mencionada como de una las autoridades con voz de mando dentro de la institución. De hecho, existen demandas en el fuero laboral que la señalan como “una de las dueñas”. Esa documentación judicial se intentó sumar a este proceso, pero su incorporación fue rechazada por el Tribunal.

Pedidos de condenas

El bloque acusatorio está integrado por la fiscal de juicio Helena de la Cruz junto a los abogados Matías Pietra Sanz y Andrea Reynoso, quienes representan a la familia Lin. Los letrados impulsan la acusación para la totalidad de los acusados, pero la fiscalía no, por una posible omisión del Fiscal General de La Plata, Héctor Vogliolo.

Sucede que la Cámara de Apelaciones sobreseyó a los empleados municipales y al dueño del colegio. El Fiscal de Cámara de La Plata no apeló y dejó firme la resolución. Pero los abogados sí recurrieron a Casación donde revirtieron los sobreseimientos y lograron lleva a juicio a Monreal, Salinas y De Luca. Este caso es otro ejemplo de la importancia de la abogacía particular dentro del proceso.

Uno de los escenarios posibles es que el bloque acusatorio pida condenas para todos los procesados sobre los que impulsan la acusación.

A todo o nada

En una mirada rápida del debate, sobre todos los acusados existen indicios de responsabilidad en la trama que se desencadenó la tragedia. Algunos de manera directa por no controlar y otros de manera indirecta por generar las condiciones o haber permitido que se generaran. Las defensas rechazan esta mirada.

El propietario Monreal es defendido por los letrados Santiago Irisarri y Flavio Gliemmo, quienes sostendrán que “quedó plenamente evidenciado luego de las declaraciones del guardavida, el director de la colonia y los testigos que ninguna responsabilidad se le puede achacar a Monreal”.

Ramos, el director de la colonia, cuenta con la defensa de la abogada Noelia Kirilenkoquien realizará un alegato con varios a puntos a tener en cuenta. Uno de los aspectos será la falta de dominio sobre el hecho tanto en la inscripción y admisión de niños como en la decisión de contratar personal y pagar los salarios. Señalará también que hay reproches dirigidos al guardavida en forma directa.

Muro y Argüelles son quienes tienen las acusaciones más graves, “abandono de persona seguido de muerte en subsidio con homicidio culposo”. Son dos de las personas que más chances tienen de ser condenadas. Estaban a cargo del cuidado de los colonos dentro de la pileta. Él como guardavida, ella como “la profe” a cargo del grupo de colonos del que formaba parte Lucas. Sus defensas buscarán la menor pena posible y evitar que vayan a prisión.

Echaniz, el coordinador del predio, tiene una situación más holgada, ya que algunos testigos lo ubicaron en un rol “como de preceptor”. Su defensa, en manos de los letrados Joaquín Colombo y Patricio Ghione, se abrazará a esos relatos para plantear que es ajeno al final luctuoso. Pero la acusación sostiene que también tiene responsabilidad en el caso.

Costa fue la directora del Jardín de Infantes del Lincoln hasta que se jubiló. Como premio a su trayectoria la hicieron accionista de la firma Oriente Monreal SRL propietaria del complejo educativo. Su defensor, Juan Gabriel Mendy, asevera con énfasis que es una colaboradora más sin ningún poder de decisión, que no formaba parte de la gerencia y que no existe nexo de causalidad con el resto de los acusados.

“No encuentro nexo de causalidad entre las funciones de asesoramiento que tenía Costa con el guardavida, con la encargada del grupo, con el director de la colonia, no tenía ninguna función ejecutiva, ni operativa, consecuentemente me parece un montón responsabilizarla por el ‘homicidio culposo’. No existe motivo para extender la responsabilidad penal más allá de los que se encontraban en el lugar del hecho y tenían obligaciones para con la labor dentro de la cual se materializó este desenlace tan trágico y tan nefasto”, señaló Mendy ante la consulta de este medio.

Por último, los inspectores municipales son defendidos por el penalista Marcelo Peña quien desde el inicio del proceso postula que sus defendidos “trabajaron acorde a la ordenanza y normativa aplicable, resulta imposible endilgarles responsabilidad penal de una tragedia sucedida mucho tiempo después del labrado de un acta”.

Un audio revelador

Uno de los pasajes más relevantes de la última jornada se dio durante la declaración de Ramos. Cuando promediaba su relato, habló de un audio de WhatsApp enviado por Roxana Costa al personal de la colonia. Ese documento sonoro fue emitido en la sala de audiencias.

El mensaje de voz está fechado el 7 de febrero de 2019, dos días después de la muerte de Lucas. Su contenido es escalofriante: “Bueno, mirá, la verdad que me deja bastante pensando todo esto. Yo lo lamento mucho, pensé que iba a contar con el apoyo al menos del 50% del personal por lo que me pide la gerencia de reabrir la colonia, que también estoy de acuerdo, porque creo que es la manera de hacer ver a la gente de que trabajamos con profesionalismo y responsabilidad, más allá de la fatalidad, de la negligencia que hubo. No voy a avisar nada todavía a la gerencia porque quiero procesar yo el proceder de ustedes que, ya te digo, lo lamento porque pensé que era otro equipo”.

Para poner en contexto, lo que en el audio se define como “la gerencia”, los testigos que pasaron por el debate lo llamaron “el colegio”. Se trata de la mesa chica de toma de decisiones. En esa mesa hay pocas sillas y, según surge de los testimonios, las ocupaban Rubén Monreal, Ruth Pasadore y Roxana Costa.

La agenda del debate

Tal como anticipó este medio, los alegatos se realizarán a partir de este jueves. El bloque acusatorio hará sus planteos y realizará sus pedidos de condena, y no se descarta que alguna sea de cumplimiento efectivo de prisión. Al día siguiente comenzarán los alegatos de las defensas que se podrían extender por más de una jornada, situación que se resolverá llegado el momento oportuno.

Luego vendrán las posibles réplicas, dúplicas y, si así lo desean, las últimas palabras de los acusados antes que los jueces se retiren a deliberar.

Además, se espera que los jueces dispongan la fecha de lectura para el veredicto y las eventuales sentencias para algunos o todos los acusados.

El juicio está a cargo del Tribunal Oral Criminal III de La Plata, presidido por Santiago Paolini y acompañado por los jueces Andrés Vitali y Ernesto Domenech.