El tribunal consideró imposible reimprimir la Boleta Única Papel tras las renuncias en la lista liberal. José Luis Espert seguirá figurando en la boleta.
La Cámara Nacional Electoral resolvió no hacer lugar al reclamo de La Libertad Avanza (LLA), que solicitaba reimprimir la Boleta Única Papel (BUP) en la provincia de Buenos Aires luego de la renuncia de tres postulantes a diputados nacionales. De esta manera, José Luis Espert seguirá apareciendo pese a su renuncia tras el escándalo por sus vínculos con el narcotráfico.
El tribunal consideró que la solicitud era de cumplimiento materialmente imposible, ya que restan menos de dos semanas para las elecciones generales del 26 de octubre. Si bien la Cámara validó el reordenamiento interno de los candidatos, señaló que el pedido de reimpresión excedía los plazos legales y logísticos del proceso electoral.
El pedido de La Libertad Avanza llegó tarde
El conflicto comenzó cuando los apoderados de la alianza liberal pidieron reimprimir la boleta con la nueva integración de la lista, argumentando que era necesario para garantizar la transparencia y el derecho del electorado a elegir informadamente.
Sin embargo, la Junta Electoral Nacional de Buenos Aires rechazó el pedido, sosteniendo que el cronograma electoral y los informes técnicos hacían inviable la nueva impresión sin afectar la organización de los comicios.
Ante la negativa, los apoderados apelaron, cuestionando que la imposibilidad fuera consecuencia del accionar de la propia Junta, que -según su planteo- demoró la resolución del caso hasta volverlo impracticable.
El dictamen del fiscal de cámara coincidió con la decisión de la Junta. En su presentación, subrayó que no existían condiciones materiales para cumplir con el procedimiento previsto por ley: “Resulta imposible oficializar un nuevo modelo de boleta, aprobarlo, reimprimirlo y distribuirlo a tiempo sin comprometer el desarrollo de las elecciones”.
Los plazos ya estaban vencidos
La Cámara Electoral recordó que el Código Electoral Nacional y la Ley 27.781, que introdujo el sistema de Boleta Única de Papel, fijan un procedimiento estricto de diseño, aprobación e impresión. Según los informes oficiales, el Correo Argentino debía iniciar la distribución del material el 16 de octubre, y el proceso previo requería al menos cinco días.
Esto implicaba que el plazo para reimprimir las boletas venció el 10 de octubre, incluso antes de que el expediente llegara a la Cámara. Los 38.760 talonarios de boletas ya habían sido recibidos el 8 de octubre, y su control estaba prácticamente finalizado.
En su resolución, el tribunal sostuvo que la cuestión “ha perdido virtualidad y se ha tornado abstracta”, dado que ya no existe posibilidad material de emitir una sentencia útil sin poner en riesgo la regularidad del proceso electoral.
“La protección de las instituciones democráticas y del calendario electoral debe prevalecer sobre los intereses partidarios” enfatizó la Cámara, que notificó su decisión al juzgado de origen y a la Dirección de Comunicación y Gobierno Abierto de la Corte Suprema de Justicia de la Nación.





